El desempeño como grupo, fue bastante bueno ya que se permitio la colaboracion de cada integrante aportando sus puntos de vista e informacion sobre los docientos años de historia patria; se ha logrado un aprendizaje mas profundo ya que gracias a el estilo de trabajo y facilidad para desarrollar las actividades, hacia posible que nos animaramos mas haciendo aun mas facil el desarrollo de esta actividad generando asi conocimientos tanto personales como para nuestro grupo y las demas personas.
pienso que el tema se presto para el trabajo ya que tenia mucho por indagar, era interesante y conocido por todos, pero con los aportes logramos conocer mas sobre el tema y llenarnos de conocimientos para la vida....
la pregunta que tengo es=
¿Cuales fueron las fuentes que tomaron como base para reunir toda la informacion?
AHORA ES MOMENTO DE SUS APORTESS!!!!!
ANIMO!!!!Laura Niño!
Mundo Del Saber
miércoles, 15 de septiembre de 2010
MAS SOBRE EL BICENTENARIO
Bicentenario De La Republica De Colombia
El bicentenario de Colombia se celebra por cumplir 200 años de independencia.
Desde la conquista española, todo pareció depender de la verdad escritural más que de la realidad pragmática. Lo podemos comprobar en la fundación de Bogotá en 1538. Al altiplano cundiboyacense habían llegado por rutas distintas tres conquistadores en busca de El Dorado: Gonzalo Jiménez de Quesada, Sebastián de Bel alcázar y el alemán Nicolás de Federmann. Eligieron doce chozas en medio del caserío de la tribu de los muiscas, pero no como edificaciones concretas sino como símbolos de las doce tribus de Israel, es decir, como ficciones judeocristianas. Para saber quién ganaba el título de fundador, los tres conquistadores debieron regresar a España y definir el litigio en las cortes de Valladolid. Ganó Jiménez de Quesada por sus habilidades retóricas, por ganarse la simpatía de Carlos V al redactar El Antijudío (1540), un tratado político en contra del obispo italiano Paulo Jovio, en cuyo libro, Historias de su tiempo, el italiano criticaba al emperador con fastidio por la influencia que empezó a tener España sobre los destinos políticos de Italia. Jiménez de Quesada contó con el poder de Adán para bautizar el noroeste de Suramérica con el nombre de su provincia natal: Nueva Granada.
Más tarde, cuando en 1810 los ejércitos neogranadinos y venezolanos comenzaron a derramarse por media Suramérica a fin de expulsar el Imperio español, el general Francisco de Miranda acudió al nombre de Cristóbal Colón para rebautizar al virreinato: tierra de Colón, vale decir, Colombia. Miranda pretendió integrar a Venezuela y Ecuador, pero ambos países sólo conservaron el tricolor amarillo, azul y rojo de la bandera. La Independencia de Colombia también había estado antecedida en el uso de la imprenta. Al decretar el virrey Flórez en 1780 el primer taller tipográfico de Bogotá, al mando del impresor Antonio Espinosa de los Monteros, nunca imaginó que veinte años después esta máquina precipitaría el fin del imperio español en Nueva Granada. El letrado Antonio Nariño (1760–1823), animador también de una tertulia que era secretamente la primera logia amasónica del virreinato, publicó allí una hoja que le habían mandado de Francia en el tomo de la Historia, nada menos que los Derechos del Hombre. La distribuyó un mediodía de 1794 en las calles bogotanas. El castigo no se hizo esperar: confiscaron su biblioteca y lo desterraron a las mazmorras de Cádiz, donde se encontró con otros inconformes y revolucionarios de América y de la misma España. Todos querían librarse de un pasado mutuo, el de la Contrarreforma y la Inquisición, que los alejaba del resto del mundo.
Por eso la guerra de Independencia se trató más bien de una guerra civil. Sin grandes poblaciones indígenas ni ciudades prehispánicas, casi todo en Nueva Granada y en la capitanía de Venezuela se había hecho a punta de conquistas y migraciones. La diferencia entre españoles y neogranadinos era imprecisa. Sólo que las guerras (lo saben los bíblicos) suelen provocarse más entre pueblos iguales o hermanos que entre pueblos heterogéneos o disímiles. Tanto el pueblo español como el pueblo hispanoamericano pusieron su grito en el cielo cuando Napoleón tomó la corona de España con el auspicio de los propios reyes y de ciertos ilustrados afrancesados. En ningún otro momento, como en 1810, las colonias fueron tan fieles al pueblo español: todas estallaron en revueltas y protestas contra un gobierno ilegítimo e invasor. Pero divisiones políticas internas abrieron un abismo tan hondo que, sin ser necesario que España mandara sus ejércitos de reconquista, ya los criollos neogranadinos se habían enredado en disputas interminables. No sabían si querían la Autonomía o Independencia. Y esta inseguridad en los términos ocasionó a que desde 1810 se batieran tres grupos en Bogotá que en ningún momento estuvieron de acuerdo. 1) El de los realistas inamovibles todavía fieles a Fernando VII; 2) el de los juristas encabezados por Camilo Torres que, estando de acuerdo con la autonomía, deseaban que esta se realizara de manera prudente y que antes hubiera también autonomía para las provincias del virreinato. Y 3) el de los revolucionarios, que irrumpieron con Nariño en el Cabildo de Bogotá para exigir romper de raíz con el pasado y crear el nuevo orden fuerte y centralista.
Nunca se pusieron de acuerdo. Ni siquiera cuando Bolívar había sellado la Independencia con la batalla de Boyacá en 1819. Seguían, esta vez, en disputas sofistas sobre qué tipo de gobierno se ajustaba mejor, si el federalismo o el centralismo, si una democracia representativa o constitucional. En adelante, los campos de batalla pasaron también a las columnas de los periódicos. Aterrado por el poder de estos ciudadanos pasivos dedicados a la prensa, Bolívar le confesó al general Santander que ellos arruinarían su empresa independentista.
DIEGO ALEJANDRO ROBAYO
El bicentenario de Colombia se celebra por cumplir 200 años de independencia.
Desde la conquista española, todo pareció depender de la verdad escritural más que de la realidad pragmática. Lo podemos comprobar en la fundación de Bogotá en 1538. Al altiplano cundiboyacense habían llegado por rutas distintas tres conquistadores en busca de El Dorado: Gonzalo Jiménez de Quesada, Sebastián de Bel alcázar y el alemán Nicolás de Federmann. Eligieron doce chozas en medio del caserío de la tribu de los muiscas, pero no como edificaciones concretas sino como símbolos de las doce tribus de Israel, es decir, como ficciones judeocristianas. Para saber quién ganaba el título de fundador, los tres conquistadores debieron regresar a España y definir el litigio en las cortes de Valladolid. Ganó Jiménez de Quesada por sus habilidades retóricas, por ganarse la simpatía de Carlos V al redactar El Antijudío (1540), un tratado político en contra del obispo italiano Paulo Jovio, en cuyo libro, Historias de su tiempo, el italiano criticaba al emperador con fastidio por la influencia que empezó a tener España sobre los destinos políticos de Italia. Jiménez de Quesada contó con el poder de Adán para bautizar el noroeste de Suramérica con el nombre de su provincia natal: Nueva Granada.
Más tarde, cuando en 1810 los ejércitos neogranadinos y venezolanos comenzaron a derramarse por media Suramérica a fin de expulsar el Imperio español, el general Francisco de Miranda acudió al nombre de Cristóbal Colón para rebautizar al virreinato: tierra de Colón, vale decir, Colombia. Miranda pretendió integrar a Venezuela y Ecuador, pero ambos países sólo conservaron el tricolor amarillo, azul y rojo de la bandera. La Independencia de Colombia también había estado antecedida en el uso de la imprenta. Al decretar el virrey Flórez en 1780 el primer taller tipográfico de Bogotá, al mando del impresor Antonio Espinosa de los Monteros, nunca imaginó que veinte años después esta máquina precipitaría el fin del imperio español en Nueva Granada. El letrado Antonio Nariño (1760–1823), animador también de una tertulia que era secretamente la primera logia amasónica del virreinato, publicó allí una hoja que le habían mandado de Francia en el tomo de la Historia, nada menos que los Derechos del Hombre. La distribuyó un mediodía de 1794 en las calles bogotanas. El castigo no se hizo esperar: confiscaron su biblioteca y lo desterraron a las mazmorras de Cádiz, donde se encontró con otros inconformes y revolucionarios de América y de la misma España. Todos querían librarse de un pasado mutuo, el de la Contrarreforma y la Inquisición, que los alejaba del resto del mundo.
Por eso la guerra de Independencia se trató más bien de una guerra civil. Sin grandes poblaciones indígenas ni ciudades prehispánicas, casi todo en Nueva Granada y en la capitanía de Venezuela se había hecho a punta de conquistas y migraciones. La diferencia entre españoles y neogranadinos era imprecisa. Sólo que las guerras (lo saben los bíblicos) suelen provocarse más entre pueblos iguales o hermanos que entre pueblos heterogéneos o disímiles. Tanto el pueblo español como el pueblo hispanoamericano pusieron su grito en el cielo cuando Napoleón tomó la corona de España con el auspicio de los propios reyes y de ciertos ilustrados afrancesados. En ningún otro momento, como en 1810, las colonias fueron tan fieles al pueblo español: todas estallaron en revueltas y protestas contra un gobierno ilegítimo e invasor. Pero divisiones políticas internas abrieron un abismo tan hondo que, sin ser necesario que España mandara sus ejércitos de reconquista, ya los criollos neogranadinos se habían enredado en disputas interminables. No sabían si querían la Autonomía o Independencia. Y esta inseguridad en los términos ocasionó a que desde 1810 se batieran tres grupos en Bogotá que en ningún momento estuvieron de acuerdo. 1) El de los realistas inamovibles todavía fieles a Fernando VII; 2) el de los juristas encabezados por Camilo Torres que, estando de acuerdo con la autonomía, deseaban que esta se realizara de manera prudente y que antes hubiera también autonomía para las provincias del virreinato. Y 3) el de los revolucionarios, que irrumpieron con Nariño en el Cabildo de Bogotá para exigir romper de raíz con el pasado y crear el nuevo orden fuerte y centralista.
Nunca se pusieron de acuerdo. Ni siquiera cuando Bolívar había sellado la Independencia con la batalla de Boyacá en 1819. Seguían, esta vez, en disputas sofistas sobre qué tipo de gobierno se ajustaba mejor, si el federalismo o el centralismo, si una democracia representativa o constitucional. En adelante, los campos de batalla pasaron también a las columnas de los periódicos. Aterrado por el poder de estos ciudadanos pasivos dedicados a la prensa, Bolívar le confesó al general Santander que ellos arruinarían su empresa independentista.
DIEGO ALEJANDRO ROBAYO
jueves, 9 de septiembre de 2010
¿Los dos siglos de lucha?
El movimiento de independencia de 1810 a 1819 nos liberó de la dominación colonial de España. Significó un cambio profundo de las instituciones, de la política y de la economía. Fue una auténtica revolución violenta. Fueron ejecutados grandes dirigentes por el dictador Morillo, murieron en el campo de batalla jóvenes promesas de la Nación, cayeron en la lucha miles de campesinos, indígenas y esclavos incorporados al ejército libertador. Nueve años de lucha, de batallas, de cárcel, de sufrimiento y de gloria. Y lo fue también de confrontación interna. No toda la población estaba a favor de la independencia. La alta nobleza criolla pro española, el alto clero, grandes terratenientes de concesiones realengas, se mantuvieron con el dominio español hasta el final.
La independencia nacional es soberanía. Y la soberanía democrática es la libre determinación de una nación para definir el carácter del Estado en sus constituciones y para escoger su sistema de gobierno sin interferencia extranjera. El movimiento de 1810 inició una larga lucha de nueve años en Colombia y de casi quince en el resto de América Latina para lograrla y consolidarla. Después de dos siglos ese objetivo de la lucha de 1810 sigue vigente. En una lucha dos veces centenaria Colombia ha sufrido dos atentados directos contra su soberanía, el robo de Panamá de 1903 y la entrega de la bases militares que acaba de hacer el gobierno de Uribe a Estados Unidos. No importa cómo se disfracen. Hoy como hace dos siglos la lucha por la soberanía es objetivo prioritario de la construcción y solidificación de la Nación.
Daniela Vásquez 901
historia del bicentenario
La historia de Colombia en el bicentenario
un proyecto oportuno
los 200 años de la independencia de Colombia son una ocasión oportuna para que conozcamos nuestra historia. Desde los primeros pobladores hace miles de años, hasta la actualidad, en 13 documentales de una hora. la televisión es el medio masivo de nuestra época y no existe una historia de Colombia que aproveche bien sus recursos.
Una historia integral e imparcial
esta historia no puede ser una narración aburrida de temas políticos y militares. Necesitamos entender cómo llegamos a ser lo que somos, cuál es el origen de nuestros problemas, riquezas y virtudes. La narración mostrará la vida cotidiana, las costumbres, diversiones y formas de alimentación, los procesos sociales y económicos, la agricultura, el comercio y la industria, el desarrollo de las comunicaciones, la formación de las ciudades, los conflictos políticos. Será una historia integral de Colombia.
CAUSAS INTERNAS Y EXTERNAS DE LA INDEPENDENCIA
Una vez que Napoleón se adueñó de España, se entabló entre este país y Francia una lucha mediante la cual las penínsulas esperan recuperar su país. Las colonias temerosas de que la metrópoli fuera derrotada por el emperador de Francia, comenzaron a pensar en la creación de un gobierno provisional para hacer frente a la situación si España caía definitivamente ante los franceses.
En 1809, en Quito, la aristocracia criolla protagonizó un movimiento contra la intervención de Napoleón en España y organizó una junta de Gobierno. Un año más tarde, en Venezuela, el capitán General fue remplazado por un gobierno provisional. En Santa Fe, los criollos se inquietaron con los sucesos de las provincias e iniciaron un movimiento semejante.
Causas externas:
En consecuencia, la Ilustración cambió todas las concepciones que existían acerca de la sociedad, en los siglos anteriores. Los ilustrados rechazaban la intervención del estado en la economía y defendían la libertad de los individuos para ejercer ciertos derechos políticos y enriquecerse mediante cualquier actividad económica; condenaba la esclavitud y, en general, no aceptaba la desigualdad entre los hombres. Concretamente la Ilustración se oponía a los monopolios comerciales.
Causas internas
Formación de juntas defensoras de Fernando VII y el problema de la representación americana
La destitución de Fernando VII provocó la formación de juntas regionales que defendían los derechos del monarca español. Estas juntas tenían representación en un organismo central, la Junta Central de Sevilla, que posteriormente se llamó Consejo de Regencia y asumió las funciones de un gobierno provisional mientras Fernando VII fuese prisionero de Napoleón. El objetivo principal de estas juntas era organizar la lucha del pueblo español contra los invasores franceses.
DAIANA MILENA MARIN MELENDEZ
un proyecto oportuno
los 200 años de la independencia de Colombia son una ocasión oportuna para que conozcamos nuestra historia. Desde los primeros pobladores hace miles de años, hasta la actualidad, en 13 documentales de una hora. la televisión es el medio masivo de nuestra época y no existe una historia de Colombia que aproveche bien sus recursos.
Una historia integral e imparcial
esta historia no puede ser una narración aburrida de temas políticos y militares. Necesitamos entender cómo llegamos a ser lo que somos, cuál es el origen de nuestros problemas, riquezas y virtudes. La narración mostrará la vida cotidiana, las costumbres, diversiones y formas de alimentación, los procesos sociales y económicos, la agricultura, el comercio y la industria, el desarrollo de las comunicaciones, la formación de las ciudades, los conflictos políticos. Será una historia integral de Colombia.
CAUSAS INTERNAS Y EXTERNAS DE LA INDEPENDENCIA
Una vez que Napoleón se adueñó de España, se entabló entre este país y Francia una lucha mediante la cual las penínsulas esperan recuperar su país. Las colonias temerosas de que la metrópoli fuera derrotada por el emperador de Francia, comenzaron a pensar en la creación de un gobierno provisional para hacer frente a la situación si España caía definitivamente ante los franceses.
En 1809, en Quito, la aristocracia criolla protagonizó un movimiento contra la intervención de Napoleón en España y organizó una junta de Gobierno. Un año más tarde, en Venezuela, el capitán General fue remplazado por un gobierno provisional. En Santa Fe, los criollos se inquietaron con los sucesos de las provincias e iniciaron un movimiento semejante.
Causas externas:
En consecuencia, la Ilustración cambió todas las concepciones que existían acerca de la sociedad, en los siglos anteriores. Los ilustrados rechazaban la intervención del estado en la economía y defendían la libertad de los individuos para ejercer ciertos derechos políticos y enriquecerse mediante cualquier actividad económica; condenaba la esclavitud y, en general, no aceptaba la desigualdad entre los hombres. Concretamente la Ilustración se oponía a los monopolios comerciales.
Causas internas
Formación de juntas defensoras de Fernando VII y el problema de la representación americana
La destitución de Fernando VII provocó la formación de juntas regionales que defendían los derechos del monarca español. Estas juntas tenían representación en un organismo central, la Junta Central de Sevilla, que posteriormente se llamó Consejo de Regencia y asumió las funciones de un gobierno provisional mientras Fernando VII fuese prisionero de Napoleón. El objetivo principal de estas juntas era organizar la lucha del pueblo español contra los invasores franceses.
DAIANA MILENA MARIN MELENDEZ
ES LA HORA!!!!
este es el espacio que hemos desidico adecuar para el aporte de opiniones de nuestro blog como grupo colaborativo!!!!
te invitamos a leer y opinar sobre nuestro trabajo.... queremos darte informacion y resivir tambien
ANIMO!!
Laura Marcela Niño
te invitamos a leer y opinar sobre nuestro trabajo.... queremos darte informacion y resivir tambien
ANIMO!!
Laura Marcela Niño
miércoles, 8 de septiembre de 2010
DOS SIGLOS DE UNA HISTORIA QUE AUN SIGUE VIVA
En la independencia de 1810 a 1819 cuando se logra la liberación del dominio de los españoles, fue una autentica revolución violenta que trajo múltiples cambios en las instituciones de la economía y política; nueve años de batallas de una lucha constante, de sufrimiento y gloria. A pesar de acabar con el dominio político por parte de los españoles, la alta nobleza criolla pro española, el alto clero, grandes terratenientes de concesiones realengas, se mantuvieron con el dominio español hasta el final; a partir de la revolución desarrollada a causa de la independencia hubo división ideológica, desacuerdo y hasta guerra civil, pero a pesar de todo, triunfo la constancia que había para liberarse de España.
Se acabo con la dominación política se acabo el virreinato, los virreyes y los funcionarios que representaban a España tuvieron que salir, y los habitantes de cada nación ahora tenían la oportunidad de elegir su representante poderlos juzgar y cambiar; poder tomar posesión de sus riquezas y recursos naturales. En el momento en que se da el grito de independencia, Cartagena, santa marta, Antioquia, choco, socorro, Casanare, Neiva, mariquita, pamplona y Tunja desarrollan juntas de gobierno independientes o constituciones propias, no fue sencillo pero se logro la consolidación de lo que entonces se llamaba la nueva granada en una sola nación hoy llamada Colombia. Dejo de tener autoridad la monarquía extranjera, la transformación llego a afectar profundamente la educación para estar a favor de la revolución y en contra de la monarquía y la jerarquía eclesiástica. El movimiento de 1810 inicio una gran lucha de 10 años en Colombia y de casi 15 para Latinoamérica, en una lucha dos veces centenaria Colombia a sufrido dos atentados directos, el robo de panamá en 1902 y la entrega recientemente hecha por parte de Uribe de bases militares a Estados Unidos y sin importar el tiempo que ha pasado hoy como hace dos siglos la lucha por la soberanía es objetivo prioritario de la defensa de la nación….
Ese 20 de julio de 1810 se forjo durante mas de treinta años y, de pronto, desde mucho antes, con numerosas rebeliones indígenas contra la dominación española, nunca les fue fácil rebelarse contra la monarquía , nunca les fue fácil separarse de las creencias eclesiásticas, pero aun así lograron terminar con el dominio del conjunto de autoridad religiosa y monarquía.
Por otra parte a Mutis y Nariño los persiguió el gobierno virreinal por sus ideas, porque fueron un baluarte de una nueva concepción de la sociedad y de la política, cada una a su manera y en su momento. Se trato de un impresionante movimiento ideológico que se expandió con una rapidez inconcebible para una época sin medios de comunicación; defendieron una nueva concepción del mundo y una nueva forma de gobierno.
En las grandes transformaciones políticas siempre surgen y se desarrollan tendencias ideológicas contrapuestas o complementarias, así sucedió en el movimiento de 1810. Y sus contradicciones
Ideológicas y políticas no solamente condujeron a enfrentamientos en el terreno de las ideas, sino que también produjeron luchas armadas; la guerra de la llamada patria boba entre los ejércitos de Nariño y torres no planteaba si no una diferencia fundamental en torno al carácter de nación unitaria o confederación de pueblos, se trataba de un punto estratégico para el futuro de lo que sería la sociedad colombiana. La lucha revolucionaria de independencia aglutinó cuatro tendencias ideológicas:
1. Los enciclopedistas, opuestos al control eclesiástico sobre las mentes como la unidad de religión y estado, con una nueva mentalidad sobre la sociedad y el poder político; entre ellos sobresalió Pedro Fermín de Vargas
2. Los liberales democráticos influidos por la revolución norteamericana y revolución de Francia con sus sistema de gobierno democrático.
3. Los liberales monárquicos radicales en su lucha contra el colonialismo, no convencidos de la democracia o influidos por régimen europeo exitoso por entonces con influencia de los revolucionarios franceses.
4. Los escolásticos radicales, ceñidos a la fe católica, con fidelidad a la monarquía y con algunas tendencias de unión con España.
Bolívar la lucho centímetro a centímetro entre 1812 y 1824 recorrió América de caracas a la Paz una y otra vez, no en automóvil, ni en tren, ni en avión, sino a caballo con un contingente de soldados criollos, mulatos, indios, negros esclavos, mal equipados, mal trajeados, mal alimentados
Que derrotarían un ejército de morillo llegado a Colombia con más de quince mil soldados. Pero bolívar lo logro, con llaneros de tierra ardiente hasta la batalla del puente de Boyacá al 7 de agosto de 1819 y siguió hacia el sur hasta coronar su misión libertadora en 1824.
Resulta trascendental entender que bolívar fue unificador. Si no hubiera sido así, la lucha independentista hubiera fracasado; unifico las ideologías, unifico las creencias, unifico la lucha, unifico el ejercito, unifico los generales, y unifico el pueblo… Bolívar fue un batallador incansable por un ideal, el de la independencia. Sufrió crisis, afronto derritas, supero traiciones, pero con su ejército obtuvo triunfos definitivos.
Hace 200 años algunos hombres dieron hasta su vida por un solo ideal el de poder ser liberados del dominio político ejercido por españoles; ellos lucharon a muerte por la separación una independencia de la soberanía, para garantizar una mínima igualdad y democracia para todos, pero a pesar de acabar con un dominio político por parte de los españoles hoy en día 200 años después de que ellos dieron su vida nos encontramos bajo un dominio económico de nuevas influencias (Estados Unidos).
Laura Niño!!!!
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